No será la primera vez que escuchas la palabra freelance, ya que últimamente está bastante de moda. Y te preguntarás, ¿Cuáles son las diferencias entre freelance y autónomo? ¿Significan realmente lo mismo?

Te diremos que depende, no significan exactamente lo mismo pero dependiendo del país y de determinados factores podremos considerarlos prácticamente sinónimos.

Si estás empezando a trabajar por cuenta propia, este artículo te puede interesar. Te contamos cuáles son las diferencias y las similitudes entre estas dos figuras: el freelance y el autónomo.

¿Qué significa ser autónomo?

Empezaremos definiendo qué es un autónomo en España.

Un autónomo es toda persona que realiza una actividad económica por cuenta propia siempre y cuando este legalmente registrada como tal ante la Administración Pública.

Para que el alta como autónomo sea válido necesitas cumplir unos requisitos legales, además de unas obligaciones fiscales.

Requisitos para ser autónomo en España.

• Darse de alta en la Hacienda Pública con los Modelos 036 o 037.
• Darse de alta en la Seguridad Social.
• Elegir una base de cotización y pagar la cuota mensual de autónomo. Desde el 2023 existe un nuevo sistemas de pagos por ingresos reales.
• Emitir facturas legales con IVA e IRPF.
• Presentar los impuestos trimestrales (IVA e IRPF) y el resumen anual.

¿Qué significa ser un freelance?

El significado literal traducido del inglés es: trabajador independiente.

Se refiere al tipo de trabajo que realiza una persona de forma independiente sin tener una relación laboral fija con una empresa.

Es decir, que un freelance trabaja por proyectos, trabaja para diferentes clientes y no existe el contrato laboral tradicional. Además, puede ejercer su labor profesional desde una oficina o coworking, desde su casa o incluso desde una cafetería.

Pero, nuestra misión desde Allges es que entiendas que un freelance no se corresponde con una figura legal por si misma. Y, si este, quiere facturar y estar al día a nivel legal en España, deberá registrarse como autónomo o bien, acogerse a alguna forma jurídica.

Diferencias entre freelance y autónomo.

¿Puedo ser freelance sin ser autónomo?

Dependerá del país en el que vivas. En el caso de España, la respuesta es clara: no. Si estás trabajando de forma habitual, emitiendo facturas por tus servicios, tienes la obligación de estar dado de alta como autónomo o usar otras vías legales como cooperativas de trabajo.

Atención, por que hay alguna excepción. Si solo realizas trabajos puntuales y los ingresos no llegan a alcanzar el salario mínimo anual , puedes acogerte a ciertas excepciones, aunque este es un terreno peligroso y te aconsejamos que consultes previamente con un asesor fiscal.

Si pulsas aquí te dejamos los datos de contacto de nuestro equipo de asesoría por si quieres que te resuelvan alguna duda.

Diferencias según el país.

Te dejamos unos ejemplos de como varía este termino y la legislación que le atañe, dependiendo del país.

• España: si quieres trabajar por cuenta propia tienes que estar registrado legalmente como autónomo, ya que es la única forma de facturar legalmente tus servicios. Como y te hemos comentado, si tus trabajos son esporádicos y no superas el SMI, entonces encontrarás alguna excepción.
• Italia: presenta un sistema diversificado. Si exige registrarse si se prestan servicios de forma habitual, pero te podrás acoger a Partita IVA, que lo necesitas para emitir facturas. O bien al Régimen Fortettario, que es un sistema fiscal simplificado para ingresos bajos o medios.
• Alemania: sistema parecido al español. El concepto freelance sí existe pero si trabajas con regularidad tienes que estar dado de alta en la Hacienda y pagar impuestos. Además, tiene dos figuras: por un lado, para profesionales liberales y, por otro, para quienes ejercen una actividad comercial.
• Reino Unido: puedes ser freelance sin registrarte formalmente como autónomo, aunque si debes declarar tus ingresos a Hacienda.

¿Freelance sin complicaciones?

Si estás empezando te dejamos algunas alternativas para poder facturar si ser autónomo.

• Podrías unirte a una cooperativa de facturación. En este caso, ellos emiten facturas por ti, y tú cobras como trabajador asociado.
• Utilización de plataformas freelancing, aunque igualmente deberás declarar esos impuesto si son recurrentes.
• Consulta si aplicas a la tarifa plana de autónomos, es decir, la cuota reducida durante los primeros meses.

Desde Allges, nuestro consejo es que si quieres trabajar por cuenta propia lo mejor es que desde el inicio cuentes con toda la legislación en regla, así evitarás muchos problemas en el futuro.

Si precisas de mas información al respecto, no dudes en contactar con nuestro equipo de especialistas en Régimen de autónomos.