¿Qué es una SICAV?
Una SICAV (Sociedad de Inversión de Capital Variable) es una entidad de inversión colectiva que adopta la forma jurídica de una sociedad anónima. El objetivo principal que tienen es la gestión de un patrimonio común que se ha podido invertir en activos financieros, haciendo así que los inversores participen de la obtención de beneficios.
Presentan ciertas particularidades y estas son sus características clave:
Capital variable
Su capital puede ampliarse o reducirse con libertad, lo que le permite la entrada y la salida de inversores.
Fiscalidad ventajosa
Tributan solo un 1% e el Impuesto de Sociedades, mucho menos que las empresas normales que tributan un 25% o incluso mucho menos que las personas físicas que tributan hasta el 45% en IRPF.
Número mínimo de accionistas.
Se necesitan como mínimo 100 accionistas, aunque muchos de estos accionistas a veces son «accionistas instrumentales» que ayudan a la SICAV a que funcione y cumpla con los requisitos fiscales.
VENTAJAS | DESVENTAJAS |
---|---|
Fiscalidad FAVORABLE por tributación al 1% en el Impuesto de Sociedades | Percepción de ELUSIÓN FISCAL por el uso de «accionistas instrumentales» para cumplir con el mínimo legal |
FLEXIBILIDAD para gestionar y adaptar la cartera de inversiones | COMPLEJIDAD REGULATORIA ya que requiere un cumplimiento de normativas específicas y supervisión por parte de la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) |
Herramienta de PLANIFICACIÓN PATRIMONIAL usada por grandes patrimonios para gestionar y estructurar su riqueza de manera eficiente y ordenada | CAMBIOS LEGISLATIVOS o modificaciones en la normativa que han reducido su atractivo fiscal y operativo |
Desde Allges conocemos el motivo de la desaparición de muchas SICAV en España y las consecuencias que se dieron.
Los principales motivos fueron los siguientes:
- Endurecimiento fiscal. El Gobierno español reformó el régimen fiscal de las Sociedades de Inversión de Capital Variable para limitar su uso como herramienta de elusión fiscal. De forma que se exigió que cada uno de los accionistas pertenecientes a estas sociedades tuvieran que invertir un mínimo de 2.500 euros.
- Transferencia del control fiscal. Antes el cumplimiento de los requisitos los supervisaba la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), pero con esta reforma, la Agencia Tributaria asumió esta función.
- Presión política y social. Se pensaba que las Sociedades de Inversión de Capital Variable eran instrumentos legales de elusión fiscal y que era un método que usaba la gente adinerada. Algunos partidos políticos y otras fuerzas promovieron su reforma o lucharon por la desaparición de estas sociedades, generando así un entorno hostil.
- Reducción de su atractivo fiscal y legal. Al haberse instaurado nuevas condiciones, el esfuerzo por cumplir con los requisitos ya no compensaba fiscalmente.
Las consecuencias de estos cambios fueron:
- Se acabó con los llamados «mariachis» (accionistas figurados que se usan para cumplir con el mínimo legal, sin inversiones realmente). Además si no se cumplía con los requisitos necesarios, la SICAV perdía el tipo impositivo reducido del 1% y pasaba de tributar el 25%.
- Hacienda estableció criterios más estrictos y empezó a investigar muchas SICAV. Por consecuencia, el riesgo de perder los beneficios fiscales o de recibir sanciones aumentó.
- La imagen pública de las SICAV se deterioró, pues se pensaba que obtenían privilegios fiscales injustos.
- Muchos de los propietarios optaron por liquidar la sociedad o convertirla en un fondo de inversión o incluso mover el capital al extranjero.
- A día de hoy los fondos de inversión, las sociedades patrimoniales y algunas estructuras internacionales ofrecen mejor relación entre los costes, flexibilidad, fiscalidad y control. Como alternativa, algunas de las grandes fortunas obtenidas de sus inversiones, se traspasaron a medios extranjeros más discretos y estables.
Impacto y situación actual
El impacto que han sufrido las SICAV, proviene de una considerable reducción del número de sociedades registradas en los últimos años. De las 2.300 registradas a finales de 2021, tan solo a día de hoy quedan, aproximadamente, 400. esto representa una disminución del 80%.
Otro impacto negativo surge a raíz de la disminución del patrimonio gestionado, pasando de 29.200 millones de euros en 2021 a 15.600 millones en 2025. Esta caída representa aproximadamente un 50%.
Además muchas SICAV decidieron transformarse en sociedades anónimas convencionales, sociedades de capital riesgo (SCR) o sociedades de inversión libre (SIL).
A día de hoy, en España la situación es muy diferente a hace unos años.
España cuenta con alrededor de 400 SICAV registradas en la CNMV, un patrimonio gestionado de unos 15.000 millones de euros.
Las gestoras con mayor volumen son:
- Santander Private Banking. Cuenta con 114 SICAV con un patrimonio de 3.655 millones de euros.
- Bankinter Gestión de Activos. Con 88 SICAV y un patrimonio de 1.956 millones de euros.
- March Asset Management. Tiene 10 SICAV y gestiona 1.917 millones de euros.
- Pactió Gestión. Tan solo cuenta con 2 SICAV pero gestiona un patrimonio de 1.320 millones de euros.
Las SICAV más destacadas por sectores

Moda y lujo
Gesprisa Inversiones SICAV

Alimentación
Soixa SICAV

Construcción e infraestructuras
Allocation SICAV y Chart Inversiones SICAV

Tecnología y farmacéutico
Herprisa SICAV

Inversores individuales
Kalyani SICAV
Las SICAV marcaron una etapa clave en la historia de la inversión patrimonial en España. Hoy, el escenario es diferente, y quienes buscan optimizar su patrimonio deben adaptarse a nuevas estructuras y alternativas.
Si te interesa saber cómo puede afectar este cambio o qué opciones existen a día de hoy para una gestión eficiente, podemos ayudarte.